Ni uno, ni dos, ni tres. ¡Los contenedores de basura más comunes son ocho!
La separación de residuos en los hogares es fundamental para darle un respiro al planeta y avanzar hacia una economía sostenible y respetuosa con el medio ambiente. Sin embargo, no siempre es fácil clasificar los residuos en casa…
Afortunadamente, el código de colores de los contenedores de basura hace más sencillo clasificar y separar los residuos. En este artículo te explicamos cuáles son los 8 contenedores de basura, sus colores y qué residuos que deben ser depositados en cada uno.
Los contenedores de basura más comunes son:
Contenedores de basura amarillos
Los residuos que deben depositarse en los contenedores de basura amarillos son:
- Envases de aluminio y latas
- Las tapas de los frascos
- Envases tipo brick
- Botellas
- Bolsas y envoltorios de plástico
En cambio, hay una serie de residuos que requieren de otra separación y no deben ir en el contenedor amarillo:
- Electrodomésticos viejos
- Accesorios y zapatillas de plástico
- Los pañales
- Juguetes que no lleven expresamente el indicativo de reciclable
Contenedores de basura azules
En estos contenedores podemos reciclar los siguientes residuos:
- Cajas y embalajes de cartón
- Papel
- Bolsas de papel
En cambio, hay residuos que no son aptos para el contenedor azul, a pesar de lo que comúnmente se piensa. Estos son los errores más comunes en la separación de los residuos para los contenedores azules:
- Servilletas usadas
- Cajas manchadas de aceite
- Pañales
Contenedores de basura verdes
Los contenedores de basura verdes están pensados para la separación y el reciclaje del vidrio. Pero ¡cuidado! Como ocurre con el resto de los contenedores, hay algunos residuos que no son aptos:
- Restos de vajillas
- Espejos rotos
- Bombillas
- Tapones de botella y tapas de frascos (deben ir al contenedor amarillo)
Contenedores de basura rojos
Este tipo de contenedores de basura se utiliza para la separación de residuos considerados peligrosos por riesgo biológico, por lo que suele ser muy común en los hospitales y centros de salud. En ellos se depositan guantes, jeringuillas y todo tipo de material sanitario con restos biológicos.
Contenedores de basura marrones
Los contenedores de basura marrones son los indicados para la separación de los restos orgánicos, como por ejemplo:
- Sobras y restos de alimentos
- Servilletas de papel y cartones manchados
- Serrín
- Tapones de corcho
Sin embargo, hay algunos residuos que no deben ser depositados en ellos:
- Polvo de barrer
- Algodón
- Toallitas
- Cenizas
Contenedores de basura naranjas
Si no sabías cómo clasificar el aceite, el contenedor naranja es la solución específica para este residuo. Recuerda que debes depositarlo en botellas de plástico cerradas.
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Contenedores de basura blancos
Estos contenedores están pensados para depositar aquellos objetos que puedan reutilizarse más adelante, tras su adecuada clasificación, aunque aún no están disponibles en todos los sitios. En estos contenedores de basura puedes reciclar libros, juguetes, y utensilios que no sean inservibles.
Contenedores de basura de grises
Se trata de los contenedores habituales, en los que se depositan los residuos que no se pueden clasificar en ninguno de los otros cubos de colores. Es posible que en tu ciudad no sean de color gris, pero son los más fáciles de encontrar por norma general. Recuerda que, en estos contenedores tampoco puedes depositar algunos residuos, que deben llevarse al punto limpio de tu localidad:
- Medicamentos
- Electrodomésticos u objetos electrónicos
- Muebles
- Ropa y zapatos
- Lámparas
- Escombros
- Pilas
- Cápsulas de café